PALESTINA
De vuelta de la nada,
Anda y cadáveres,
anda y
escombros
anda y un niño con su pelota rota.
Llega cansado de silencios,
Y traga cenizas,
traga humo,
traga polvo de acero.
El sabor amargo del dolor
humano le rasga la garganta.
La fría metralla explota en
sus entrañas,
en su sangre,
la de su padre, la de su hijo.
Llanura yerma, ya no crecen
las palabras.
Caen los besos en vacío junto a vidas cero, sin edad ni
nombre.
Le da girones la piel a cada
paso, y quiere paz
Le da girones la piel, y quiere guerra
Le da girones la piel, y no quiere más;
No más armas,
pero sí ramas de olivo.
No más mantas
para muertos,
sí abrigo para los pequeños.
Y grita, quiere gritar QUE NO
HAY LIBERTAD,
NI
TECHO.